Ni castigo físico, ni violencia contra la niñez

Hace tres años el Congreso aprobó la conocida «Ley Antichancleta», a través de la cual se prohíbe el uso del castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes y cualquier tipo de violencia como método de corrección contra niñas, niños y adolescentes.

A través de esta ley se busca que los niños tengan derecho al buen trato, a recibir orientación, educación cuidado y disciplina, por medio de métodos no violentos. Protegiendo de esta forma su integridad física, psíquica y emocional.

A pesar de la existencia de esta ley para garantizar la protección de los menores, las cifras de violencia contra los niños, niñas y adolescentes demuestran la necesidad de avanzar en medidas que permitan que sea una realidad la eliminación del maltrato contra ellos.

Según datos de Medicina Legal en 2023, 607 menores de edad fueron víctimas de muerte violenta. De otra parte, las estadísticas de la Policía Nacional, para ese mismo año en el 2023 se presentaron 12.532 casos de violencia intrafamiliar, los infantes fueron los más afectados con 7.663 casos, seguido por los adolescentes con 4.869.

El Boletín estadístico del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, reportó 69.660 niños, niñas y adolescentes, con procesos de restablecimiento de derechos, en su mayoría por omisión o negligencia con 18.523 casos. Violencia sexual 18.420, permanencia en calle 4.299, abandono 3.478, violencia física 2.020 y violencia psicológica 1.173 casos.

Frente a este panorama, el representante liberal Julián Peinado, del departamento de Antioquia señala que el relacionamiento con los menores debe ser con  respeto,  “esta ley es de gran importancia, cambia el chip de la forma como nos relacionamos en sociedad, en qué fundamentamos nuestras familias, es
un tema que se ha venido trabajando hace 40 años, en la Convención Internacional de los Derechos del Niño y que cambia la forma como interactuamos con los niños, reconociéndolos como ciudadanos objeto de derecho y no como propiedad, o como una parte instrumental de la familia. Se les ve como seres humanos, que merecen el respeto y se les reconoce sus derechos”.

Diversos estudios se han adelantado sobre el tema del castigo físico en los menores, al respecto, la organización Save The Children señala: «El castigo físico y humillante afecta al desarrollo cerebral del niño y su bienestar emocional, lo que puede provocar problemas de salud mental a largo plazo. Hay pruebas de que el castigo corporal conduce a un aumento de comportamientos antisociales y la agresividad, que pueden prolongarse hasta la edad adulta, con un gran coste para la sociedad”.

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud ha dicho que «los castigos corporales están vinculados a diferentes efectos negativos para los niños en todos los países y culturas, en particular problemas de salud física y mental, deterioro del desarrollo cognitivo y socioemocional, malos resultados escolares y una mayor agresividad y posibilidad de recurrir a la violencia».

Avances en la implementación de la ley

La organización Niñez Ya, realizó un análisis de las acciones, metas e indicadores para la niñez definidas en el Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026, allí se estableció la propuesta para Potenciar el Pacto contra las Violencias y la implementación de la Estrategia Nacional Pedagógica y de Prevención del Castigo Físico, los Tratos Crueles, Humillantes o Degradantes, donde se resaltan los siguientes avances, que van en línea de la “Ley Antichancleta”:

*Creación del Plan Nacional de Acción bajo el cual se articulan las entidades del Estado, la cooperación internacional y las organizaciones de la sociedad civil.

*Desarrollo de los planes de acción departamental

*Activación de grupo guardianes de la niñez.

*Participación en el mecanismo articulador para el abordaje integral de violencias por razones de sexo y género.

¨*Generación de mapas de violencias para identificación de casos en los territorios

Esta ley también creó la Estrategia Nacional Pedagógica y de Prevención, en la que distintas entidades deben trabajar por la eliminación del castigo físico y los tratos crueles, humillantes o degradantes contra niños, niñas y adolescentes, y establece acciones para la formación de los padres de quienes ejercen la patria potestad o las personas encargadas de cuidar niños, niñas y adolescentes, para que cuenten con herramientas que les permitan proteger y atender de manera adecuada a los menores. Además, realiza acciones de difusión, sensibilización y acompañamiento para prevenir el uso del castigo físico.

Frente a esta estrategia nacional, el ICBF reportó el desarrollo de mesas técnicas con organizaciones de la sociedad civil y otras entidades para generar acciones preventivas de esta problemática, mientras que el Congreso de la República, en el marco de la plenaria por la niñez en abril de 2024, resaltó la importancia de incrementar los esfuerzos y compromisos en la implementación de la Ley 2089 de 2021 que involucre la creación de políticas públicas a nivel territorial, la asignación de recursos presupuestales y la creación de mecanismos de seguimiento y evaluación.

Al respecto, el representante Julián Peinado mencionó, «castigar a un niño con golpes revela la falta de preparación de nuestra sociedad para criar con amor y respeto. Es necesario implementar la Estrategia Nacional Pedagógica y de Prevención del Castigo Físico, contenida en nuestra ley que prohíbe
el castigo físico, para promover métodos de crianza alternativos, además de capacitar a padres, cuidadores, educadores y funcionarios que estén a cargo de la infancia en nuestro país”.

A pesar de esos avances desde la Alianza por la Niñez Colombiana hacen un llamado para que el Gobierno Nacional implemente la Estrategia Nacional Pedagógica y de Prevención del Castigo Físico. “Para ello es necesario que se asignen recursos presupuestales para su ejecución y se incluyan las voces de las niñas, niños, adolescentes y sus familias en el diseño, implementación y evaluación de dicha iniciativa”, afirmaron en su informe.

Cabe señalar que Colombia ha avanzado en las medidas para prohibir todo tipo de maltrato contra los menores, y gracias a esta ley está dentro de los 65 países de un total de 199 prohíben actualmente todas las formas de castigo corporal, incluso en el hogar. Además, esto ha permitido que nuestro país esté en línea con varias metas de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, donde se exhorta a la eliminación de la violencia contra los niños, y se busca poner fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las formas de violencia y tortura contra los niños.

Marchas a favor de la niñez

Los recientes hechos de violencia contra los menores motivaron que padres de familia, niños, madres cabeza de hogar, organizaciones de diferentes sectores y congresistas, marcharan el pasado 19 de octubre en más de 30 ciudades, liderando el slogan: ¡con los niños no te metas!, y protestas contra todas las acciones que atentan contra su bienestar como lo es el maltrato, discriminación e indiferencia institucional.

El representante por el departamento de Antioquia del partido Conservador, Luis Miguel López Aristizábal, mencionó, “Alexis solo tenía 2 años. Sofía apenas 12. Ambos son víctimas de lo que pasa en Colombia con los niños; sus muertes, aunque en distintas circunstancias, señalan a lo mismo: en Colombia los niños mueren por la indiferencia. ¡No más indolencia, no más desprotección! Si no protegemos a los niños, no habrá futuro.

Para la presidenta de la Comisión de Infancia y Adolescencia, la representante Erika Sánchez del departamento de Santander, estas marchas son un mensaje para decirle a los adultos, a los cuidadores de menores y a la sociedad en general “¡Con los niños no se metan!, marchamos en señal de protesta por las alarmantes cifras de violencia en contra de nuestros niños, niñas y adolescentes.

Adicionalmente varios congresistas firmaron una constancia de rechazo a los hechos violentos contra la niñez, donde señalan, “en representación del pueblo colombiano, reiteramos nuestro compromiso de reformar y fortalecer las leyes de protección infantil, y solicitamos al Gobierno Nacional se aumente la inversión en programas de prevención y atención a víctimas de violencia infantil. A su vez, solicitamos al ICBF y al Ministerio de justicia establecer mecanismos efectivos de denuncia y atención, y crear un registro nacional de agresores de niños, niñas y adolescentes bajo la vigilancia de Organismos de Control y veedurías ciudadanas.

El comunicado agrega: Instamos a todos los colombianos a unirnos en la lucha contra la violencia infantil y a denunciar cualquier acto de agresión contra los niños. Solicitamos a la sociedad civil, instituciones educativas, sector privado, actores de la cooperación internacional y medios de comunicación, a difundir información y concienciar sobre la importancia de proteger a la infancia”.

Colombia será la sede por primera vez la de la Conferencia Ministerial Mundial para poner fin a la violencia contra la niñez

Como estrategia de prevención contra la violencia infantil, entre el 7 y 8 de noviembre, se realizará en nuestro país el encuentro mundial para poner fin a la violencia contra la niñez, evento que estará liderado por el Gobierno Nacional, con la participación de más de 1.400 asistentes de todo el mundo. Líderes mundiales, ministros, viceministros y organismos internacionales que se reunirán para impulsar acciones globales que garanticen un futuro seguro y sin violencia para nuestras niñas, niños y adolescentes.

Al respecto la directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), Astrid Cáceres, señaló que la Conferencia Ministerial Mundial para Poner Fin a la Violencia contra la Niñez tiene dos escenarios: El primero, es un compromiso de país innovador, que permita dar un salto estratégico frente a las violencias contra la niñez para decir: BASTA YA. El otro escenario es para poder mostrarle al mundo varias de nuestras experiencias en las que podemos aprender de los sistemas comunitarios sobre el cuidado de la niñez.

Los y las congresistas que integran la Comisión de Infancia y Adolescencia del Congreso de la República harán presencia en esta Cumbre Mundial por la eliminación de la violencia contra la niñez, en defensa de la niñez colombiana a fin de coordinar e implementar iniciativas a favor de los niños y niñas del país.