Exención del 4×1000 para las Juntas de Acción Comunal

Por: Prensa, representante Wilder Escobar

La iniciativa de autoría y ponencia del Representante Wilder Iberson Escobar Ortiz, del Partido Gente en Movimiento y representante del departamento de Caldas, busca fortalecer el papel de las Juntas de Acción Comunal (JAC) al eximir del Gravamen a los Movimientos Financieros (GMF), conocido como el 4×1000, a los convenios solidarios celebrados entre estas juntas y entidades del orden Nacional, Departamental, Distrital y Municipal.

¿Qué propone este proyecto?

El proyecto consta de tres artículos, tiene como objetivo incluir un nuevo numeral en el artículo 879 del Estatuto Tributario, el cual regula las exenciones del GMF. De esta forma, los convenios solidarios firmados entre las Juntas de Acción Comunal y las distintas entidades públicas quedarían exentos de este gravamen, que desde su creación en 1998 ha representado una carga financiera significativa.

Con esta medida, se busca aliviar los costos operativos de las JAC, fortaleciendo su capacidad de ejecutar proyectos que impacten positivamente a las comunidades. Este cambio normativo permitiría una mayor autonomía y eficiencia en el uso de los recursos por parte de estas organizaciones, que son esenciales para el desarrollo comunitario en el país.

Impacto en las comunidades

El Representante Wilder Escobar destacó que esta iniciativa responde a la necesidad de potenciar el trabajo comunitario, otorgando a las JAC herramientas que les permitan enfocarse en sus proyectos sin la presión de costos financieros adicionales. “Este proyecto es un reconocimiento a la importancia de las Juntas de Acción Comunal en el tejido social de Colombia. Su trabajo no debe verse limitado por barreras financieras como el 4×1000. Esta exención les permitirá canalizar más recursos hacia proyectos que beneficien directamente a las comunidades”, afirmó Escobar.

La exención del GMF no solo representa un alivio económico, sino que también fortalece la capacidad de las JAC para ejecutar programas de impacto social, como la construcción de infraestructura básica, la gestión de servicios comunitarios y la promoción de iniciativas culturales y educativas.

El camino legislativo que resta

Tras su aprobación en segundo debate en la Cámara de Representantes, el Proyecto de Ley No. 376 de 2024 Cámara deberá continuar su trámite en el Senado de la República. Se espera que esta iniciativa cuente con el respaldo necesario para convertirse en ley, dado su impacto positivo en el desarrollo regional y comunitario.

El congresista ha reiterado su compromiso con el fortalecimiento de las Juntas de Acción Comunal, resaltando su papel como motores del desarrollo en las regiones más vulnerables del país. Además, ha hecho un llamado a las demás instancias legislativas para mantener el respaldo a esta medida, que tiene como fin último beneficiar a las comunidades y promover un desarrollo inclusivo.

Un antecedente del 4×1000

El Gravamen a los Movimientos Financieros fue creado en 1998 como una medida transitoria para enfrentar una crisis económica, pero con el tiempo se convirtió en un impuesto permanente a través de la Ley 633 de 2000. Desde entonces, su impacto ha sido significativo en distintos sectores, incluyendo las Juntas de Acción Comunal, que han enfrentado desafíos para cumplir con sus metas debido a este costo adicional.

Con este proyecto, se busca corregir esta carga histórica, permitiendo que las JAC sigan liderando procesos de transformación en las comunidades sin trabas financieras innecesarias.

La aprobación en segundo debate del Proyecto de Ley No. 376 de 2024 Cámara representa un paso clave hacia un reconocimiento más justo del trabajo comunitario en Colombia. Este avance legislativo, liderado por el Representante Wilder Escobar Ortiz, marca un hito en la promoción de la justicia tributaria y el fortalecimiento de las bases sociales del país.